El miedo es en
blanco y negro.
Anónimo
La mamá de Joaquín
le dijo que faltaba poco para ir a la escuela, ya tenía edad para salir del
jardín y aprender muchas otras cosas, entre ellas leer, escribir, contar.
Joaquín pensó que
dejaría a sus compañeros de grupo, sus “tías”, le daba miedo ir a un lugar que
no conocía, además no le interesaba aprender otras cosas, a él lo que más le
gustaba era dibujar, todo lo que quería decir lo hacía por medio de un dibujo,
cuando la mamá cumplía años, pintaba una flor con muchos colores y algunas
veces el papá recibía un corazón grande y de color rojo.
Como lo hacía todas
las veces que quería expresar algo, tomó sus lápices y empezó a dibujar aquello
que sentía: "el miedo", hizo muchos trazos, con diferentes colores,
uniendo el rojo con el negro, el naranja con el verde, el azul marino y el
amarillo, mucho café por todos lados.
Al ver el dibujo
parecía una selva, una cueva poco iluminada, daba la idea de alguien que estaba
perdido en ese mundo de líneas y símbolos, Joaquín lo guardó sin mostrarlo a
nadie y no volvió a pensar en el miedo de entrar a la escuela.
Muy pronto se llegó
el inicio de clases y Joaquín ingresó a la escuela primaria, el primer día
recordó aquel miedo que sintió cuando la mamá le mencionó el cambio. Al entrar
a su salón la profesora los recibió con un abrazo y les mostró todos los
dibujos que estaban en las paredes, los había de diferentes animales, flores,
paisajes, él sintió que esos dibujos eran un mensaje para el, le decían que
tuviera confianza, que olvidara el miedo.
La maestra les
entregó muchos lápices de colores y una hoja en blanco para que hicieran un
dibujo, del tema que más les gustara, Joaquín prefirió los colores que le permitieron
dibujar el arco iris en un campo lleno de flores, árboles, un riachuelo y unos
niños jugando acompañados de una profesora.
Los miedos de estar
en la colegio se habían quedado en el cajón donde guardó aquel dibujo de los
colores fuertes, cada día disfrutaba de sus nuevos amigos y de todo lo que
aprendía.
En una ocasión que
acompañaba a su mamá mientras veía las noticias de la tarde, observó que
mencionaban la palabra "guerra", las personas que hablaban
mencionaban el peligro de muchos niños que vivían en los lugares donde se presentaban
los problemas, en la pantalla aparecieron niños con heridas en su cara y que
lloraban, tenían miedo, se veían solos, tristes, Joaquín se sintió igual que
aquellos niños aunque estaba a mucha distancia y no los conocía.
Durante muchos días Joaquín
estuvo pensando en esas imágenes de la televisión, en aquellos niños, el miedo
de que él y sus compañeros estuvieran en la misma situación, recordó la manera
en que acostumbraba enviar mensajes, dibujando, ahora no dibujaría por miedo,
tenía que decirles a esos pequeños que otros niños pensaban en ellos y les
deseaban que mejoraran, que hicieran a un lado el miedo y que sonrieran.
Le dijo a su mamá
que le comprara muchas hojas blancas y se puso a dibujar, flores, estrellas,
animales, árboles, playas. Le conto a su profesora su idea y entre todos los
compañeros hicieron más dibujos, corazones, caritas sonrientes, las líneas de
los dibujos de Joaquín y sus amigos mostraban amor, el sentimiento que combate
el miedo.
Cuando enviaron los
mensajes a los niños que no conocían, se sintieron valientes, cerca de aquellos que recibieron los regalos y el
cariño dibujado en muchos colores.
No hay final feliz
que no este lleno de colores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario